Nazareno

La imagen de Jesús Nazareno representa a Cristo en su camino hacia el Calvario, llevando sobre sus hombros la cruz del sacrificio por la redención de la humanidad. Su figura, con rostro sereno pero marcado por el dolor y la entrega, expresa la profundidad de su amor y el peso del sufrimiento que asumió por los pecados del mundo. Se le suele vestir con una túnica morada, color que simboliza penitencia y realeza, y su cabeza está coronada con espinas, evocando la humillación sufrida. La cruz, en sus manos firmes, recuerda el llamado a seguirlo con fe y esperanza, abrazando las cruces de la vida diaria. Jesús Nazareno es una imagen de consuelo, fortaleza y perseverancia para los fieles, inspirándolos a reflexionar sobre el sacrificio divino y a caminar con confianza hacia la salvación, confiando en su amor misericordioso.